Si yo llegué
al periodismo por la literatura, ¿cómo es que llevo más de treinta años en
Radio Nacional de España? Y es que tal vez toda esta mágica profesión se
resuelva con la aparente simpleza de Chaves Nogales: andar y contar. Si ando
para atrás, veo a un niño de Los Palacios y Villafranca (Sevilla) que miraba a
la marisma, un adolescente que llevó a casa los primeros libros, un joven
estudiante asombrado en Madrid. Me busqué la vida y la dicha en territorio
hostil, aunque entonces pagaban las colaboraciones. Una, en El País, trataba de
las revueltas contra la mecanización del Bajo Guadalquivir. Las prácticas en Informe
Semanal (TVE), de la cultura alegre de la Movida. Formé parte de Liberación,
aquel periódico de izquierdas que lideró Alfonso Sastre en 1984. Hubo beca en la
radio pública, mili, oposiciones y regreso al Sur. A mi adn se agregan dos
equipos, RNE y el Sevilla FC. He convivido con extraordinarios profesionales,
de los que sigo aprendiendo. Gran parte de estas tres décadas las he pasado en
tareas de edición y diversas responsabilidades informativas. Crear un
noticiario es una pasión similar al sueño imposible de ordenar el mundo,
siquiera por unas horas. En estos tiempos, vuelvo a ser Jefe de Informativos e
Interactivos de RNE en Andalucía. Y regreso al poeta adolescente con las
entrevistas de Biblioteca Pública RNE, un podcast de entrevistas a escritores
que comencé en 2013 para RTVE A la Carta.