Páginas

lunes, 22 de abril de 2019

Jorge Molina

En casa siempre mi padre traía el diario en papel. Y cómo no leerlo, con sus breves textos y fascinantes fotos granulosas. Ser periodista es algo que ejercí mucho antes de licenciarme, como tantos otros. Pero el oficio no lo aprendí hasta que pasaron los años y los errores. La cuna fue Radio Aljarafe –madriguera de una gran camada-, y después El Correo de Andalucía, honra del gremio hasta su asesinato. En verdad entendí por completo este negocio tras pasarme a la comunicación institucional, y luego con mi consultora.

Todos los años de la Expo 92, con pre y post, me marcaron; al igual que los temas de medio ambiente, que es un clásico fijo en mi vida profesional y me dio tantas satisfacciones y premios. Siempre procuré deshacer visiones rancias y animar al avance, a veces con más candidez que base, mediante informaciones y opinión, sobre todo como jefe de Local. Ahora, con la visión que ofrecen justo 30 años de profesión, creo que volvería a repetir buena parte de mis intenciones. La visión de un chico de pueblo fascinado por la capital. Encantado de narrar buscando un estilo propio. Un periodista de encendido rápido.

Jorge Molina   Sevilla 2019